domingo, 19 de abril de 2009

fuerza de voluntad

Ayer fui al circo y disfruté como un chiquillo.
Es curioso como cambian las cosas con los años. Fuimos toda la familia… adulta. Contratamos un microbus y nos fuimos a Bilbao todos los hermanos y cuñados, los hijos mayores que quisieron venir y en vez de llevar a los peques, nos llevamos a los abuelos.
Estuvimos viendo el espectáculo “Varekai” del Circo del Sol. Alucinante. Una gozada. Se le puede recomendar a cualquiera. Al final te duelen las manos de aplaudir, los mofletes de sonreir y los párpados de tener los ojos abiertos como platos.
Es sorprendente el montaje, la plasticidad y la complejidad de los números circenses.
Te quedas atónito con, no solo la elasticidad de los artistas, sino también el equilibrio y sobre todo la fuerza que exigen muchos ejercicios aunque no lo parezca.
Y precisamente eso es lo que más me llamó la atención, no ya lo que hacen sino que parece que lo hacen sin ningún esfuerzo, con toda la naturalidad del mundo. Y eso no se consigue de la noche a la mañana ¡qué va!
Es indudable que son personas que tienen unas facultades físicas innatas impresionantes, pero más indudable todavía es que esas facultades las han trabajado y entrenado mucho. Qué digo mucho ¡muchísimo!
Y digo yo, es eso…

¿FUERZA DE VOLUNTAD?

En muchas ocasiones, mis pacientes me dicen que pensaban que no tenían fuerza de voluntad y que se están sorprendiendo a sí mismos con lo bien que están consiguiendo llevar su dieta de adelgazamiento.
Por otra parte, otros muchos se quejan de que tienen muy poca fuerza de voluntad y que por ese motivo sucumben con facilidad a las tentaciones y rompen la dieta con demasiada frecuencia.
Es curioso que aunque unos y otros digan que no tienen fuerza de voluntad, unos hacen bien las cosas y otros no lo consiguen.
Yo tengo mi propia teoría al respecto y así se lo intento explicar.
Mi opinión es que hacer o no hacer bien la dieta no tiene nada que ver con la fuerza de voluntad. La cuestión es plantearse unos objetivos claros y poner los medios necesarios para conseguir esos objetivos.
Para mí, fuerza de voluntad es hacer las cosas por narices aunque no nos apetezca nada hacerlas. Fuerza de voluntad es, por ejemplo, levantarse por la mañana para ir a trabajar (de no ser que seas adicto al trabajo, adicción que por otro lado, no logro entender, lo mire por donde lo mire) o, en el caso que nos ocupa, hacer dieta por obligación o por presiones (de ahí lo importante que es, como decía al principio del blog, “querer” adelgazar).
Sin embargo, cuando una persona tiene claros sus objetivos (lo que quiere conseguir), pondrá todos los medios a su alcance y no reparará en esfuerzos (voluntarios, con actitud mental positiva) para conseguir esos objetivos. Si, por ejemplo, queremos aprobar un examen, tendremos que estudiar (o preparar chuletas, o dar el cambiazo o copiar al compañero...) para conseguir aprobarlo, pues simplemente comprando los libros y acudiendo al examen, será muy difícil, por no decir imposible, lograr ese objetivo.

Pues bien, si conseguir adelgazar es nuestro objetivo (no nuestro sueño), tendremos que buscar los medios para conseguir alcanzarlo (buscar la ayuda de un buen profesional, intentar seguir lo más fielmente posible sus indicaciones o decir “no” de vez en cuando sin sentirnos mal por ello...)


4 comentarios:

Guillermo Aisa dijo...

Creo que a eso de la fuerza de voluntad, un tal Alex Rovira junto a Fernando Trías de Bes lo llamaron crear circunstancias para la Buena Suerte, como explican en el librito que publicaron en 2004 con el mismo título: "La buena suerte". Algo que, según dicen, es muy diferente a la suerte a secar. Otra buena frase que creo que es de Einstein, dice algo así como "Cómo esperas cambiar las cosas si sigues haciendo lo mismo" o "Si sigues haciendo lo mismo, no esperes resultados diferentes". En definitiva, que algo hay que cambiar en las rutinas de uno y, luego, tener paciencia, no abandonar. Guillermo

Jose dijo...

He leído "La Buena suerte", un cuento sencillo con una verdad como enseñanza y como moraleja: "Sólo triunfa en el mundo quien se levanta y busca las circunstancias y las crea si no las encuentra".
En cuanto a lo de si sigues haciendo lo mismo, conseguirás los mismos resultados,no sé si es de Einstein o no, pero la frasecita de marras la he leído en varios libros (incluso en "adelgazar en positivo"), entre ellos en uno del dr. Lair Ribeiro que se titula "El éxito y la prosperidad no llegan por casualidad", que también resume en el título lo que intento transmitir en el capítulo ¿fuerza de voluntad? que he colgado en esta entrada

Diego dijo...

Así que somos todos lectores de 'La buena suerte'.
Ahí introducto yo otra frase similar a la de Einstein: "En tiempos de crisis sólo sobrevivirán los que tengan una receta original", es del gurú del márketing Jonas Ridderstrale. Vamos, que si alguien hace siempre lo mismo, conseguirá el mismo resultado y no saldrá de su propia situación de crisis (últimamente estoy muy involucrado en temas de crisis, lo sienteo José, pero también es una crisis buscar bajar de peso y no conseguirlo, ¿no?).
Estoy de acuerdo contigo Doc, hay que cambiar las cosas, a base de buena volundad para que todo mejore.
Un abrazo, Diego.

Jose dijo...

Bueno, esto de la crisis ya aparece en todos los lados y puestos a poner citas,"en tiempo de tribulaciones (o de crisis en su caso)no hacer mudanza". No tengo muy claro a quien pertenece, pues se la he visto atribuida a San Agustín,a Santa Teresa y a San Ignacio de Loyola. Lo que parece claro es que algún santo la debió decir en algún momento determinado. Digo yo que a lo mejor fue (por aquello de la crisis) el Santo Job, que aúna paciencia y trabajo (job, en inglés).
Ah! y si hacemos caso a los chinos, que dicen que crisis también significa oportunidad, también lo puede ser buscar bajar de peso y conseguirlo ¿no te parece?