Esto de internet es la pera...
Alucino cuando veo que en menos de 2 semanas hay visitas desde Venezuela o del Reino Unido, donde, que yo sepa, no tengo conocidos a los que haya comunicado la publicación del blog, lo que quiere decir que la gente navega hasta por los cibermares más insospechados.
Solo quería deciros que intentaré contestar todos los comentarios que vayáis haciendo con otro comentario a renglón seguido del vuestro. A lo mejor (bueno, casi seguro) no inmediatamente después de que escribáis, que tampoco soy un viciado de esto ni estoy todo el día conectado, pero de verdad que lo intentaré.
Hasta ahora, creo que lo he hecho.
Al fin y al cabo, amor con amor se paga
4 comentarios:
Querido doctor:
Sacaré ventaja de este blog tuyo para debatir algunos temas pero sobre todo para mantener un contacto más cercano contigo. Hoy he bajado de la ofi al super a seguir esa dieta que me tengo programada (una que me dice... guíate por algún antojo pero que sea siempre sano, ¿o acaso el jamón no lo es, con su buena cantidad de hierro y zinc?) Y me he dado un antojo de los que realmente me gustan (el yogur). Curiosamente he encontrado un (transcribo literalmente) Bífidus de cabra de agricultura ecológica de Madrid (la marca no la digo que no me paga nada).
No sé, doc, pero me ha dado por pensar... al probrarlo, que con todas las cosas ricas que hay en el mercado, vosotros los dietistas deberías estar al tanto de ellas. Vamos a ver, no entiendo de dietas y la única vez que he seguido una ha sido durante los 18 años que viví bajo el mismo techo de la mía mamma (esas sí que son dietistas...), pero creo que una dieta que programa un doctor es un tanto 'aburrida en sabores'.
Creo que la ciencia de los alimentos nos ha dado sabores muy variados como para hacer una dieta "entretenida" con sabores ricos. A mi la verdura, especialmente fresca, me parece "aburrida" y suelo cambiar su aporte vitamínico por el de las frutas (y más aún desde que tengo una batidora donde me hago unos deliciosos zumos).
Supongo que ese puede ser el problema que encuentro a las dietas que marcan ustedes y creo que habrá mucha gente que opine lo mismo y las deje de lado por ese mismo aspecto.
No sé que opinas al respecto, tú eres el experto, pero ¿no crees que las dietas que marcan los doctores como tú deberían ser más ricas en sabores? Me da la sensación de que en vuestro sector el médico marca mucho las calorías sin preocuparse del 'placer del sentido del gusto', y ahí puede encontrarse el problema de los abandonos. Productos como este 'yogur' supongo que tendrán unas propiedades riquísimas, y tal vez en el caso de muchos doctores su desconocimiento sobre estos productos es muy alto, algo que debería corregirse para que no haya abandonos.
Tu dirás doc, yo soy el letrado, tú el científico.
Un abrazo, Diego.
Lo primero que me llama la atención es lo del “bífidus de cabra de agricultura ecológica de Madrid”. El bífidus es un fermento láctico, no caprino. La cabra (¿sólo una?) será de ganadería ecológica, no de agricultura, digo yo. Y de Madrid ¿qué es? ¿La cabra o la agricultura ecológica? Vamos, que mejor que no digas la marca, que aparte de no pagarte nada, tampoco nos aclara mucho XD.
Tonterías al margen, no te falta razón cuando dices que muchas de las dietas que prescribimos son un tanto aburridas, pero no siempre es culpa de los prescriptores.
A mi me gusta mucho manejar dietas “cualitativas”, es decir, dietas en las que seleccionamos alimentos y formas de preparación sin tener demasiado en cuenta las cantidades y uno de los consejos que doy a mis pacientes es que procuren variar, dentro de lo permitido, lo que comen, como lo mezclan, como lo cocinan y, por qué no, como lo presentan. De esta manera se evita el aburrimiento del socorrido “lechuga y pechuga” y casi sin darnos cuenta, conseguimos una dieta no solo apetitosa, sino completa y equilibrada, que no deja de ser lo que hacían, aunque fuera con otros ingredientes, nuestras dietistas madres ( y no digamos las abuelas).
Aunque no es mi intención hacer un blog de recetas (aunque no me importa en absoluto que el personal vaya enviando recetas “de dieta” para compartir entre todos), esta misma tarde, un colega tuyo de profesión me ha pasado la receta de una ensalada de alubia verde (cocida al dente) con colas de gambas cocidas, tomate y cebolleta aliñada con una vinagreta de aceite de oliva virgen extra, vinagre de sidra, ajo picado y sal… aunque no seas muy de verdura ¿no se te hace la boca agua?
Y si controlamos la cantidad de aceite, no me digas que no es una receta apta para una dieta de adelgazamiento.
Como comento en el capítulo “dieta y gastronomía” de mi libro, la mejor dieta es inútil si no es aceptada por la persona a quien va dirigida pero tampoco tenemos que olvidarnos de las propiedades nutritivas de los platos preocupándonos exclusivamente por sus propiedades gustativas.
Y sí, no soy cocinero, pero sí cocinillas y tengo la deformación profesional de fijarme en las estanterías y leer composiciones de productos cuando voy al súper.
Bueno, Diego, ya ves, yo digo que contesto… y contesto, que uno es muy de contestar.
Nueva transcripción del texto. Por el posible error al que he podido llevar a la gente.
'Granja ecológica' 'Bífidus de Cabrar' 'marca'
'marca, otra vez' 'Bífidus de Cabra' 'Leche fermentada con bífidus' 'Ganadería ecológica' 'Elaborado con leche de nuestras cabras' 'Comité de Agricultura ecológica de la Comunidad de Madrí'
Tonterías al margen, también yo, por cierto proteína 4,5% y materia grasa 5,2%, me encanta saber y percatarme de que algunos de los conceptos que dentro del mundo en el que trabajo, vosotros también los utilizáis, y no sólo los médicos se dedican a preparar estrategias NAOS o cosas similares.
También sé que algunos se preocupan por la cantidad de calcio y vitamina D que ingerimos (Santiago Palacios, director del Instituto Palacios de Salud y Medicina de la Mujer), pero en mi trabajo me llegan muy pocos casos de ellos. Y esa imagen de cuenta-calorías creo que os daña, por lo menos es la que me traslada mucha gente con la que curro. Espero que iniciativas como las tuyas ayuden a cambiarla.
Un fuerte abrazo y ya acompañaremos esas judías verdes con unos taquitos de jamón (dentro de las múltiples variedades que hay encontramos alguno idóneo para ello) un buen chorretón de oro liquido (echas tú que yo no sé cuando habría que echarle), ajo picado (la sal la suprimimos, que para algo está el jamón), y me resisto un poco a lo del tomate y la cebolleta, pero haremos el esfuerzo. Eso sí, por Dios, no me avinagres la comida.
Un fuerte abrazo, Diego.
¿ves como hablando se entiende la gente?
Y sobre gustos, no hay nada escrito. Unos prefieren gambas, otros jamón, otros jamón y gambas... en fin, que no quiero avinagrarte ni la comida ni el fin de semana.
Que los disfrutes.
Ah, y mucha suerte con tu recién estrenado blog (jamón y fútbol, se titula por si a alguien le interesa, que seguro que sí)
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